Mientras siguen ondeando las olas de Calafell y tú haces como si no pasara nada, aquí estoy yo, una vez más, frente al ordenador con lágrimas en los ojos.
Fuiste tú, el que inició una historia aquel día 17 de Junio en la estación del norte, el que hizo que mi vida cambiara por completo, eres el culpable de cada una de mis ralladas, de mis pensamientos, de cada palabra que escribo. Y esque no hay nada más bonito que sentir lo que yo siento ahora mismo hacia ti, pero no sabes lo duro que se me hace saber que tú haces tu vida fuera de ese vínculo invisible que nos unia y encerraba en la monotonía.
Siento este texto tan ridículo pero ahora tengo el lado romántico, no disponible.. cerrado por reformas..
No hay comentarios:
Publicar un comentario